lunes, 30 de julio de 2007

Una reunión de amigos

Dicen que basta con verse quizá de vez en cuando para saber que están allí, que nunca se fueron, que cambiaron, pero siguen siendo los mismos.

La noche del sábado fue otra especial jornada de camarería, de pizza, de antojos, de risas, de hijos correteando, de anécdotas entresacadas a la fuerza de los recuerdos y sobre todo de momentos para ponerse al tanto de cada uno. También de una mesera, servicial y algo novata, que nos hizo pasar más de un susto con el manejo de las cuentas.... En Master Pizza, donde no tengo en reparo ni compromiso en decirlo, hacen las mejores pizzas de Guayaquil, fue una vez más el sitio de la reunión. Master Pizza es como una especie de casa nostra... y quien lo hace posible, sin duda es Ricky, con ese calor de gente que tiene.

Gracias por estar allí, chicos. Gracias a los de siempre y a aquellos a quienes se los bautizó como "accesorios" (entiéndase esposas, hijos, esposos, novias). Y aunque faltaron muchos y se los extraño, será para otra ocasión, donde se vuelva a juntar, casi que de la nada ese placer de volvernos a sentir como si de la escuela nunca salimos.... siendo los mismos que nos acompañamos en esta aventura llamada vida.

La ocasión era recibir a Alexa Velarde, que más que porteña parece una gringa más. Estuvieron César y su enamorada Karen, Los Cires García (Verónica, Jorge y la pequeña Valentina, aún de 6 meses de gestación), además fuimos todos acompañados por Carla y su hija Daniela. Da susto ver cómo de la nada, esa pequeña se convirtió en señorita. Los Pazmiño (Pablo, Vanesa y sus dos hijas), Los Orellana (Miki y sus dos amores, Jenny y Ana Paula), Ricardo, aunque enfermo y todo, allí estuvo... los Vivero (Nora y Martín), y claro Mi poto, el Matías, que pasó como que dormido, Becky y yo... el autor de este brevísimo recuento que para nada hace justicia al maravilloso momento que se compartió entre los amigos.









Pura vida!!











lunes, 23 de julio de 2007

Vuela... vuela, mi Poto...



Tienes la simpleza de lo hermoso y la complejidad de lo cautivante. ¡Que ya no me amas!.. dices con pucheros cada vez que te llamo la atención... ¡Que ya no eres mi amigo! cuando no te complazco en lo que me pides... y te amo más... y no me importa que lo digas, porque mi amor va más allá de tus rabietas, de tus enojos y de ese pico que haces con tus labios carmín.

Me encanta verte abrazar la barriga de mamá... llamar hermanito al pequeño Matías, que se alborota nada más sentirte (me lo ha dicho mamá). Me encanta que le pongas entusiasmo y te alegres con su llegada... adoro cuando haces referencia a que ya SOMOS CUATRO y nos enumeras... Me encanta que también seas participe de esa alegría que sentimos por la llegada de Matías....


Vuela, mi amor... vuela en tu mundo construido de caballeros, de fantasmas chistosos, de risas fingidas y escandalosas...

Con amor...





lunes, 16 de julio de 2007

Bienvenido MATÍAS...

Este es el perfil de Matías... tiene 23 semanas.

Matías… Debo reconocer que desde ahora eres completamente fascinante. No solo que rompiste todos los pronósticos, pues no te ha bastado con hacer quedar mal hasta los que pintan de tener sueños agoreros (tu abuelo Oswaldo y tu tía Lore), sino que has demostrado que tiendes a levantar dudas hasta en los más crédulos (Nadie ha creído el veredicto del especialista). Hijo, ve aprendiendo que en esta vida se es santo y al mismo tiempo demonio. Lo que para uno está bien, para otros no. Pero tranquilo, que en el camino que nos espera, tanto mamá como yo sabremos enseñarte eso y muchas otras cosas más. De momento sigue feliz en el lugar más apacible de este mundo, el vientre de mamá. Crece, fortalécete y juega con los sonidos y los vaivenes de una mamá que ya estaba desesperada por conocer tu sexo y que ahora ansía saber de tu personalidad.

Has sido hecho varón. Y la noche del domingo 15, entre los juegos y locuras del poto, que ahora se las da de caballero, tomando una regla como espada, una raqueta de ping pong, como escudo, y el pato amarillo, como guante, decidimos llamarte Matías. Mamá, como es su costumbre, había seleccionados un listado no muy grande de posibles nombres… algunos bien extraños como Uriel, otros de carácter como Alejandro… Pero nos decidimos por Matías, tanto por su sonido dulce y fuerte, como por ser el nombre del apóstol escogido para reemplazar a Judas. Por cierto, de Matías poco se sabe en la Biblia… así como de ti hasta ahora… poco se sabe, pero has sido puesto en esta tierra por un objetivo y tocará que lo descubras.

Tocó esperar más de una hora para saber tu sexo. La verdad si alguien quiere ir a APROFE, un sábado por la mañana, piénselo dos veces, porque lo que menos hay es agilidad. Y está bien que así sea, en cosas de embarazo la atención detallada es lo primordial. Nada de dejar dudas a los usuarios. Por ese lado, estoy consciente de que la espera aunque ya empezaba a resultar molestosa, ha valido la pena. Y es que casi no te dejas ver. Estabas sentado. Como que queriendo ocultarte más tiempo, sumando incógnita y desespero especialmente en mamá, pero bastó una maniobra del médico que con seguridad te enojó, para que nos mostraras de qué estás hecho. 2 B y una P evidencian en la fotografía del eco que eres varón.


La felicidad me embargó. Al igual que a tu hermano, Andrés, quien por primera vez asiste a un eco. Tenías que haber visto su rostro de sorpresa. No se perdió ningún detalle, con singular curiosidad observaba los equipos, el gel que el especialista colocaba sobre la barriga de mamá, escuchaba tus latidos y hasta metía su cabeza por los brazos del médico para no perder ningún detalle en el monitor. ¿Qué habrá entendido de la imagen? Solo él lo sabe. Lo cierto es que aunque el creía que ibas a ser su hermanita, no puso ningún reparo en que seas su hermanito… Por el contrario también se alegró mucho. Andrés insiste en llamarte Pocoyó… no acepta Matías… el dice que te llamas Pocoyó, sí como el menudo nene que juega con un elefante, un perro, un pato y un pájaro… para el Poto… eres ese… y él está muy feliz…

Quizá fueron una especie de premonición, dice mamá, las palabras aquellas cuando describía la relación con tu hermano… cuando dije que nos disputábamos un amor, el de mamá y dije que se abriría otro frente… ese que con justo derecho lo vienes a pelear tú, mi sol. No creo en premoniciones, lo sabes, pero estoy seguro que los TRES nos llevaremos de maravilla y saldremos por allí a divertirnos, como los varones solemos hacer, entiende ir al estadio, comprar películas, jugar fútbol o voli… cosas que mamá no entiende porqué las hacemos, en lugar de quedarse en casa, conversando y compartiendo sueños y teorías con ella.

Matías… los tres estamos ansiosos de tu llegada. También lo están los abuelos, las tías y primos. Sabemos que serás amado y protegido por todos, sobre todo, bendecido grandemente, como lo ha sido tú hermano Andrés.

Matías… Te amo


Bienvenido




Pd: Leyla... no vamos a repetir el ECO... no insistas y acepta... es un lindo varón. Además, ya hay muuuchas mujeres en la familia...

martes, 10 de julio de 2007

Los pequeños placeres...


No hay nada más divertido para que llegar de la escuela, descalzarse y patinar con medias sobre el piso encerado. No hay nada más divertido que jugar largas horas en la bañera. No hay nada más divertido que amanecer el sábado a ver tele, cuando papá y mamá aún duermen. No hay nada más divertido que sentarse por allí, por fuera de la escalera, a torear a papá... No hay nada más divertido, amor, que verte divertirte con esos pequeños placeres que te da la vida y que muchas veces, mi cuadrada adultez ya no logra entender....

lunes, 2 de julio de 2007

Mucho frío en la playa


No hubo espacio al baño acostumbrado, porque el frío que calaba profundo lo impidió, pero hubo persecuciones, avionsitos que no se dejaban alcanzar, carreras de pique corto, en las que de pronto ganabas, pero sobre todo hubo el disfrute de una mañana de verano, fría y familiar, parádójicamente muy cálida, para los vientos que a la sazón de 22 grados de temperatura nos obligaban a caminar en lugar de estar sentados. Y allí estabas, siguiendo como patito los pazos dejados por mamá.
te amo